Mensaje del P. Germán
La primavera inicia el 20 de marzo y la parroquia propone una
celebración penitencial (confesiones) esa noche.
La creación cambia de estación y la naturaleza
se despierta del invierno para aprovechar del sol que cada día estará más
presente y más caluroso. Las plantas “resucitan” para ofrecernos hermosas flores
y también frutos para nuestra alimentación. La vida se manifiesta en todas
partes.
El clima, la manera de vestirnos, la decoración
de las ciudades y de las casas también
cambian con la llegada de la
primavera.
¿Y nosotros? ¿Vamos a cambiar en el fondo de
nosotros mismos, en esta primavera? ¿Vamos a limpiar nuestro corazón y abrir
nuestra vida a la luz del Evangelio?
Para los cristianos, la primavera
empieza la noche de la Vigilia Pascual, el 7 de abril, con la
celebración de la resurrección de Cristo. La Iglesia nos propone el tiempo
de cuaresma para prepararnos interiormente, para recibir la belleza, la luz y la paz de la Resurrección
con un corazón puro y una vida limpia.
Así pues, el martes 20 de marzo a las 7pm, la
parroquia San Sebastián nos propone una
celebración penitencial. Tendremos
en la parroquia, cinco sacerdotes,
provenientes de parroquias vecinas, para ofrecernos el sacramento de la
reconciliación.
Sólo
Dios puede perdonar nuestros
pecados y Jesús dejó a la Iglesia la misión de reconciliar a los hombres
y mujeres entre ellos y con Dios por
medio del sacramento de la reconciliación.
El sacramento de la reconciliación, o la
confesión como le llamábamos antes, es una bendición de Dios
para todos los hombres y mujeres humildes
que se reconocen pecadores y que imploran la ayuda del Espíritu Santo para
caminar hacia la santidad.
Solamente los fuertes y las personas honestas
saben pedir perdón. Solamente la gente inteligente reconoce que necesita
cambiar.
Entonces, aprovechemos el regalo que Dios nos
ofrece para reconciliarnos con Él, con
nosotros mismos y con nuestros hermanos
y hermanas.
Aprovechemos el sacramento de la reconciliación para purificar nuestro
corazón de todas las manchas del pecado y preparémonos a florecer con la
creación para que los frutos del amor que hay en nuestro corazón sean
abundantes.
El martes 20 de marzo a las 7pm en San Sebastián, usted podrá seleccionar el sacerdote que considere más
conveniente en su lengua materna, así también podrá pedir al Señor, por medio de la Iglesia y el sacerdote,
que lo(a) escuche, que
perdone sus pecados y que le de la gracia del Espíritu Santo para avanzar con
la alegría de aquellos que tienen un corazón en paz.
Feliz camino hacia Pascua.
P. Germán 17 y 18 de marzo del 2012