15º Domingo del tiempo de la Iglesia
Año Litúrgico B
Los Ángeles, el 12 de julio
del 2015
1ª lectura: del libro del profeta Amós
7,12-15
Salmo: 84(85)9-10.11-12.13-14
2ª
lectura: carta de San Pablo a los Efesios 1,3-14
Evangelio: de San Marcos 6,7-13
La liturgia de este domingo nos recuerda que
hemos sido escogidos por Dios y enviados en misión en comunidad.
Escogidos por Dios:
La primera
característica de todos los cristianos es que hemos sido escogidos por Dios.
Eso no quiere decir que somos mejores que los demás, sino que a pesar de
nuestras debilidades y dudas, Dios nos escogió en medio de todos.
La primera
actitud de todos los bautizados debe ser la acción de gracias. Debemos dar
gracias a Dios por habernos escogido. No hemos pedido nada y tampoco merecemos
algo, pero Dios nos escogió libremente.
Si todas
las mañanas empezáramos el día con una pequeña oración de acción de gracias,
nuestra jornada sería más agradable, más productiva y más positiva. Tratemos de
tener un pequeño pensamiento, una pequeña oración de acción de gracias en la
mañana, y veremos la diferencia en todo lo que haremos durante el día.
Aquellos
que son conscientes de su dignidad como bautizados, aquellos que se sienten
orgullosos de haber sido escogidos por Dios, son personas que gozan de la vida.
Que miran los acontecimientos de su existencia de una manera positiva, y que
son apreciados por los demás porque transpiran el olor de santidad, el olor del
Santo Crisma perfumado con el cual fueron consagrados el día de su bautismo.
El día de nuestro
bautismo aceptamos que Dios nos haya escogido. Recibimos el Espíritu Santo,
hemos sido consagrados, somos miembros del Cuerpo de Cristo y hemos sido enviados en misión en comunidad.
Esta es otra razón para darle gracias a Dios. Nosotros somos los embajadores de
Dios en la tierra y no estamos solos. Somos miembros de una comunidad, de una
familia que se llama la Iglesia.
A veces
criticamos a la comunidad, o hablamos mal de la Iglesia. Seamos honestos y
reconozcamos todo lo que la comunidad nos ha ofrecido. Observemos el pasado y
descubramos todo lo que la Iglesia nos ha transmitido. Somos miembros de esta
Iglesia y la imagen de la comunidad, depende de lo que ustedes y yo hagamos por
ella. El día de nuestro bautismo fuimos escogidos por Dios y enviados en
comunidad, a construir el Cuerpo de Cristo visible en la tierra.
Si la
gente que viene a esta comunidad descubre la acogida, la alegría y la paz, es
porque ustedes y yo trabajamos juntos por que nuestra comunidad sea acogedora,
celebre con alegría y comparta la paz del Señor con aquellos que nos
frecuentan.
En esta
semana, empecemos los días con una pequeña oración de acción de gracias al
Señor, por habernos escogido y preguntémonos ¿cómo respondemos a la misión que
el Señor nos ha confiado en esta comunidad?
Amén P. Germán