1º
Domingo de Cuaresma
Año Litúrgico A
Los Ángeles 9/10 de marzo del
2014
1ª
lectura : Libro del Génesis 2,7-9; 3,1-7a
Salmo : 50(51)3-4, 5-6 12-13, 17
2ª lectura : de la carta de Sn Pablo a los Romanos
5,12-19
Evangelio: San Mateo 4,1-11
En este primer Domingo de Cuaresma, la iglesia
nos recuerda el momento de las Tentaciones
presentadas a Jesús.
Dios se deja tentar para mostrarnos que es
posible vencer a quien nos induce a pecar.
El Evangelio de este domingo, nos muestra tres
tentaciones que debemos desafiar durante toda nuestra vida.
Los bienes materiales, el poder y el
alejamiento de Dios.
Los bienes materiales:
Todos sentimos el deseo de poseer cada día más.
Frecuentemente tenemos tantas cosas acumuladas,
que no hay lugar en nuestro hogar para almacenar tantos objetos que
nunca utilizamos.
Entre más cosas poseemos, más sentimos el deseo
de poseer. En esta semana podemos hacer una limpieza en nuestras casas. Pero lo
más importante, cuando nos deshagamos de todo lo que poseemos, y que no
necesitamos, pensemos en las personas necesitadas y compartamos con nuestros
hermanos y hermanas todo lo que no es importante o esencial para nosotros.
El poder:
Todos tenemos un poco de poder. Algunos
sustentan mucho poder, otros un poco menos. Pero todos, tenemos cierto poder
sobre nuestros hermanos y hermanas. En la familia, en el trabajo, en la
comunidad y en la sociedad, hay personas que ejercen un cierto poder. En este
tiempo de cuaresma, preguntémonos si el poder que ejercemos sobre los demás,
nos representa un medio para servir a nuestros hermanos y hermanas, o por el
contrario, si utilizamos el poder para enriquecernos, para oprimir, para
explotar a nuestros hermanos y hermanas.
Jesús nos mostró durante toda su vida que el
verdadero poder consiste en ponerse al servicio de aquellos que están bajo
nuestra autoridad.
El alejamiento de
Dios:
La tentación que ha acompañado siempre a
nuestra humanidad, es la de alejarse de Dios. Mientras más dinero y
conocimientos tienen el hombre y la mujer, la tentación de creer que no
necesitan a Dios y de que pueden vivir sin Él es mayor. Construir su vida sin
Dios, es la tentación del hombre y la mujer orgullosos que se creen grandiosos,
inteligentes y ricos y que piensan que
pueden construir su vida sin Dios.
Hoy en día, hay cada vez más personas que
reconocen la existencia de Dios, sin embargo
piensan que no necesitan a Dios para vivir. Es lo que llamamos el
“ateísmo práctico”.
En esta cuaresma tomemos un poco de nuestro
tiempo para orar. Aprovechemos de esta cuaresma para observar y escuchar a
Aquél que nos da la vida, la salud, la paz y la felicidad.
Dios espera que vayamos hacia Él para llenarnos
de su amor, de su luz y de su fuerza.
En esta Cuaresma dejémonos mirar por Dios y
tratemos de cambiar nuestra vida.
Aprovechemos de esta cuaresma para compartir
con aquellos que lo necesitan. Observemos alrededor de nosotros para ayudar a
nuestros hermanos y hermanas que están bajo nuestra autoridad, que viven o
trabajan con nosotros.
Dejémonos amar por Dios,
tratemos de crecer en el amor y en el respeto para con nuestros hermanos y
hermanas.
Amen.
P.
Germán